CASOS DE ÉXITO
Atendemos las necesidades de nuestros clientes.
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CÍTRICOS
En el cultivo del cítrico, factores como el estrés hídrico, la salinidad del suelo, la irradiación solar y diversas carencias nutricionales afectan directamente al cuajado, al calibre del fruto y, por tanto, a la rentabilidad de la cosecha. Las formulaciones bioestimulantes de última generación de GREENLAND han sido diseñadas para mitigar de forma eficaz los principales estreses que inciden sobre el desarrollo del cultivo. Gracias a nuestras nuevas tecnologías, los productores han conseguido:
Estimular la brotación en plantones tratados frente a no tratados.
Recuperar árboles paralizados por estrés o fitotoxicidad, devolviéndoles su vigor productivo.
Incrementar el rendimiento, tanto en número de frutos como en su calibre.
Disminuir las pérdidas por quemaduras solares, cada vez más comunes debido al aumento de la radiación.
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OLIVO
El olivo, tradicionalmente resistente a condiciones extremas, ha prosperado en climas duros y suelos pobres. No obstante, la creciente escasez de agua y las recientes variaciones térmicas plantean nuevos retos para su cultivo. Gracias a la formulación bioestimulante de GREENLAND, se ha conseguido:
Estimular la fotosíntesis, promoviendo un desarrollo vigoroso y equilibrado de raíces y follaje.
Activar las defensas naturales del árbol, ayudando a prevenir enfermedades como el repilo, la verticilosis y la aceituna jabonosa.
Favorecer cosechas más estables, incluso bajo condiciones climáticas adversas.
Mejorar la calidad del fruto, con mayor contenido graso y mejor perfil organoléptico.
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AGUACATE
El aguacate se ha consolidado como un cultivo estratégico gracias a su alto valor nutricional, al ser fuente de vitaminas, folatos y minerales esenciales. No obstante, presenta una alta exigencia agronómica: requiere condiciones óptimas de suelo, clima, nutrición y riego. Además, es especialmente susceptible a factores bióticos como ácaros, cochinillas, trips y agallas, lo que incrementa la complejidad de su manejo. Gracias a los programas específicos de bioestimulación de GREENLAND, se ha conseguido:
Recuperar plantaciones afectadas por estrés salino, reactivando el desarrollo vegetativo y mejorando el cuajado.
Estimular la emisión floral, favoreciendo una fructificación más eficaz.
Impulsar el engorde del fruto, aumentando el calibre.
Mejorar de forma significativa la calidad y el rendimiento final de la cosecha.
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ARROZ
El arroz, uno de los pilares fundamentales de la alimentación a nivel global, enfrenta múltiples desafíos en su cultivo, especialmente cuando se cultiva en arrozales, es decir, campos anegados diseñados específicamente para su producción. Está científicamente documentado que el estrés abiótico afecta directamente la formación de espigas y el llenado del grano. A esto se suma la compactación del suelo en entornos encharcados, que limita la actividad radicular y reduce el rendimiento de las plantas. La aplicación de bioestimulantes GREENLAND ha permitido:
Potenciar el crecimiento vegetativo y el vigor general del cultivo.
Mejorar la floración, el cuajado y el llenado de los granos.
Lograr campos más homogéneos, con panículas más grandes y mayor número de granos por planta.
Aumentar la producción anual en un promedio del 20%, incrementando así la rentabilidad del cultivo.
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FRUTOS ROJOS
El arándano es altamente valorado por su riqueza en antioxidantes, vitaminas y fibra, lo que impulsa su demanda global. No obstante, es especialmente sensible al estrés hídrico. La falta de agua induce el cierre estomático, lo que reduce la fotosíntesis y el transporte de nutrientes. Esta situación favorece deficiencias y la acumulación de especies reactivas de oxígeno (ROS), que dañan las células y disminuyen el vigor y la resistencia de la planta. El empleo de programas de bioestimulación GREENLAND ha dado como resultado:
Favorecer el ajuste osmótico, ayudando a las plantas a mantener el equilibrio hídrico.
Actuar como antioxidante, reduciendo el daño celular por especies reactivas de oxígeno.
Aumentar el crecimiento vegetativo en un 18%.
Mejorar el calibre de las bayas, con más del 10% superando los 20 mm.
Obtener hasta una tonelada adicional por hectárea, gracias al aumento en rendimiento.
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HORTÍCOLAS
Las hortícolas intensivas como el tomate, el pimiento o la lechuga son particularmente sensibles a las condiciones actuales de calentamiento global. Su ciclo corto de cultivo, la alta demanda nutricional, el estrés térmico y el agotamiento progresivo del suelo representan desafíos constantes que comprometen tanto el vigor de las plantas como la calidad de la producción. La aplicación de las formulaciones GREENLAND ha demostrado ser decisiva para:
Mejorar el desarrollo foliar y el crecimiento vegetativo.
Potenciar la coloración y el rendimiento, especialmente en cultivos como tomate, pimiento y alcachofa.
Aumentar la tolerancia al estrés abiótico, como la salinidad, fitotoxicidad o el uso de agua de baja calidad.
Mantener e incluso elevar la productividad y calidad en condiciones climáticas adversas.
